"Le debo la ternura", de Víctor Pascual (hijo)

Le debo la ternura,
Le debo el amor,
Le debo la cordura,
Le debo la pasión y la comprensión.
Incluso le debo mi estatura.

Le debo mis dos hermanas
Que son dos luces en la oscuridad.

Le debo mis ojos.
Le debo mil tardes de pintura y charla en el campo.
Le debo mil paisajes,
Y mil playas,
Y mil atardeceres.
Y le debo, desde luego, muchos más de mil consejos.
Ni viviendo varias vidas podría devolverle todo esto.
Ni siquiera la mitad.

Por eso, Padre, intentaré,
Como sé que tú querrías
Y como buenamente pueda,
Traspasárselo a mi hija
A tu nieta.
Yo sé que me lo diste para eso.

Gracias Padre,
Compañero, Amigo.
Gracias por darme tanto
Sin pedirme nada.